Lavado de cara

Renovarse es vivir, dicen. He cambiado los muebles de casa y salgo a la calle luciendo prendas que acabo de comprar en un supermercado. El nuevo ajuar lo acabo de estrenar en la entrada anterior. Un lavado de cara no viene mal de vez en cuando. Mi ansiedad, sumada a una torpeza nata, ha sido responsable de que he perdido datos de la plantilla, como los enlaces y también el contador de 35.903 visitas de lectores de 100 países (como cualquier otra bitácora ayudada por la facilidad en la comunicación que ofrece Internet), al pasado día 22, que se suman a más de 4.000 iniciales desde abril de 2006. Estos datos son intrascendentes, sólo dejo constancia para no perder la contabilidad personal de las cuentas que no llenan de dinero mis bolsillos, ni mi humilde cuenta bancaria fronteriza con los caros números rojos con que castigan los bancos. Hay blogs que tienen infinidad de post como La Huella Digital , del periodista gallego Nacho de la Fuente, o miles de comentarios como Generación Y de la cubana Yoani Sánchez. Admiro también la pulcritud, en todos los sentidos de la web Migramundo de otro informador desde tierras gallegas, Guillermo Pardo, que transmite sensibilidad y filosofía en su página Migramundo. De ellos, entre otros, aprendo mucho, desde sus puntos de vista, llenos de sentido común, que desparraman por el mundo y que nos ayudan a profundizar en la realidad que no siempre nos la cuentan con todas las claves necesarias para comprenderla mejor. Salu2...