lunes, enero 14, 2008
La utilidad del silencio
Eso es cierto, tan cierto como que tengo un nombre con alas celestiales, arcangélico nombre que nada corresponde: Ángel, me dicen, y no me levanto disciplinado y recto con las alas mordidas -quiero decir: las uñas- y sonrío y me callo porque, en último extremo, uno tiene conciencia de la inutilidad de todas las palabras. ('Preámbulo a un silencio', de Ángel González)
Alguien dijo una vez que si piensas lo que has sido y lo que has abandonado, comprenderás que sólo el silencio fue majestuoso, y todo lo demás, nada más que una muestra de debilidad.
El grito de los políticos acalla el silencio de la gente.
Hoy me levanté con ganas de decir algo sobre nuestra tierra, pero no encontré motivo alguno para hacerlo. Una tierra con presidentes indeseables no se merece nada. Un mandatario que elogia a los terroristas, una presidenta a la que lo que más le preocupa es la cirugía estética de recauchataje que mejore la apariencia de su rostro ya cincuentenario, entre otros dirigentes corruptos, mezclados en el narcotráfico y el poder desmedido, mientras en las aldeas no hay para comer, no hay agua potable ni electricidad, no hay sanidad pública ni educación y siempre se echa la culpa a un enemigo exterior.
Estoy triste, quizás, porque ha muerto un poeta, Ángel González, con el que tuve ocasión de hablar con él personalmente. Mi homenaje ha sido publicar uno de sus poemas, al principio de este escrito, añadidas a palabras compuestas simplemente por un modesto juntaletras.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
8 comentarios:
tus letras me alcanzan , me llegan
Pues no deberías estar triste, compañero, si mirases más dentro de ti que a tu alrededor. Porque dentro de ti encontrarías un trozo de Ángel González.
Un abrazo. Y ánimo.
Pues te ha salido el homenaje redondo. Mi enhorabuena.
La muerte de un poeta siempre es algo triste. Muchos besos.
...me sumo en tu homenaje al poeta González y suscribo lo dicho. Con estos mandatarios indeseables solo apetece callar...
Gracias por la visita compañero. Una pena lo de Ángel González, y la situación que describes en tu país.
Un abrazo
Todo dicho... mi apoyo.
Te abrazo
MentesSueltas
Ojalá y un día podamos decir:
El grito de los políticos NO ACALLA el silencio de la gente.
Saludos...
Publicar un comentario